Fin de la primera parte

Ya se terminó todo aquello, regresé a Madrid y me encontré con que todo seguía igual. Algunas cosas han cambiado, pero no tantas realmente. Vuelvo y me da la sensación de que no ha pasado el tiempo, de que me fui y volví al día siguiente. Da la sensación de que todas las maravillas vividas en este año hayan sido un sueño, con la diferencia de que este sueño nunca jamás se me va a olvidar, este se va a quedar dentro de mi para siempre. Esto no es una despedida, es un hasta luego. Imagino que retomaré el blog cuando me vuelva a poner la mochila a la espalda y salga del país de nuevo. Gracias a todos los