Después de una relajada noche en nuestra cabaña salimos a la calle para realizar un par de rutas de senderismo. Toda esta zona es conocida por ser tierra de osos y muy biodiversa. Un recorte de periódico colocado en la recepción de las cabañas muestra un alce paseando frente a las cabañas. Siempre es bonito emocionarse pensando que vas a poder ver algún animal de este tipo en tu viaje…
Llegamos hasta el parking a orillas del río Chapel, y justo detrás de nosotros llegó un autobús lleno de runners. Si el turismo de grupos ya es desesperante, imagínate si además de ir en grupos grandes, van corriendo. Aprovechamos que hicieron una fila interminable en el cuarto de baño para ir adelantando camino y adentrarnos por el sendero que lleva a las Chapel Falls. Íbamos caminando tranquilos y en silencio disfrutando de la naturaleza. Múltiples ardillas se cruzaban en el camino, y un poco más adelante, de repente, un grupo de venados de cola blanca se quedaron pasmados mirándonos. Pasmados nosotros también, tratamos de no movernos y quedarnos observándoles. Cuando ya estaban confiados y continuaron con sus movimientos normales, comiendo hierbas y mirando hacia los lados, apareció un pelotón de runners (que además hablaba a voces) y los espantaron. Además se burlaron de nosotros con un “uauu, un venado!”, como dando a entender que hay muchos y que ellos están cansados de verlos. En este momento me vinieron a la cabeza las propagandas electorales de los jardines de esta zona. Finalmente llegamos hasta las cataratas y nos sentamos un rato a observarlas. No son tan impresionantes como las de Tahquamenon, pero el bosque que las acompaña les da un aspecto muy acogedor.
Retrocedimos el camino andado y empezamos otra ruta que también iniciaba desde el parking, el sendero hasta las Mosquito Falls. Un camino estrecho que circula por un arroyo medio seco, y donde otro grupo de runners nos pasó corriendo y gritando. A esto se le sumó un grupo de niños de colegio que iban lanzando piedras, corriendo por todas partes y chillando; por lo que no volvimos a ver ningún animal en el camino. Aunque llegamos a las cascadas antes que los niños y pudimos disfrutar de un rato en soledad en este lugar, los niños aparecieron rápido estropeando el momento. El lugar es un poco más salvaje que las otras caídas, no tiene mirador y tiene unas rocas desde las que puedes descender hasta las orillas del río. Desde este punto, puedes continuar hasta la playa Mosquito, a orillas del lago Superior, sin embargo, retrocedimos el camino hasta el coche y aprovechamos para visitar otro lugar, pues esa playa la visitaríamos desde la excursión que teníamos reservada para la tarde.
Nos desplazamos con el coche hasta el Miners Castle Point, una formación rocosa que adopta la forma de un torreón al borde del lago. Desde aquí hay unas pasarelas muy bien cuidadas para poder observar el punto desde diferentes perspectivas. Este lugar también tiene zonas de picnic y barbacoas para disfrutar el día en el bosque.
Como ya nos arañaba el hambre por dentro, nos fuimos hasta el pueblo de Munising, desde donde salía el paseo en barco por la costa del lago Superior. Mucha gente se amontonaba en la cola, y nos advirtieron que había overbooking… nunca nos lo habríamos imaginado. Finalmente conseguimos acceder y obtener un buen asiento en el lado derecho de la cubierta. El barco salió puntual e iba explicando las diferentes formas que tienen las rocas y los arcos. Sinceramente no me enteré muy bien, pues iba boquiabierto disfrutando de los diferentes colores y manchas que se forman en estos acantilados de arenisca. Estos magníficos colores y formas provienen del agua subterránea que se filtra desde los bosques existentes en su superficie, dejando manchas de hierro (rojo), manganeso (negro-blanco), limonita (amarillo-marrón), cobre (rosa-verde) y otros tantos minerales. Uno podría dedicarse a hacer primeros planos de estos patrones coloreados y enmarcarlos para colocarlos en las paredes de las casas más modernas de Manhattan. El recorrido llega hasta la Mosquito Beach y luego se asoma a las Chapel Beach Falls. Por todo el camino hay piraguas, yates y muchas personas haciendo actividades recreativas. Sin duda, este debe ser un lugar fantástico de veraneo.
Con los ojos en forma de corazones, regresamos hasta nuestras cabañas para descansar después de un día intenso lleno de actividades, no sin antes pasar por el Pine Stump para tomarnos una cerveza.
Fecha: 10 al 25 de Agosto de 2019
Ruta: Chicago – Middlebury – Shipshewana – Detroit – Niagara-on-the-lake – Niagara Falls – Toronto – Fergus – Elora Gorge Conservation Area – St. Jacobs – Bruce Peninsula (Fathom Five – Tobermory – Mermaid Cove – Singing Sands – Log Dump – Miller Lake) – Manitoulin Island (South Baymouth – M’Chigeeng – Bridal Veil Falls – Gore Bay – Silver Water – Misery Bay – Cup & Saucer Trail) – Sault Ste. Marie – Upper Peninsula (Tahquamenon Falls – Grand Marais – Chapel Falls – Munising – Miners Castle – Mosquito Falls) – Lake of the Clouds – Summit Peak – White Pine – Bergland – Madison – New Glarus – Monticello – Monroe – Chicago