Encuentros casuales y no casuales

Llevo siete días sin actualizar esto, pero es que han sido unos días un tanto movidos. Como dije, me reuní con mis amigas de Madrid; llegaron con retraso a San Pedro, pero por fin nos encontramos. Hemos tenido muchas cosas de las que hablar; ellas ponerme al día de las cosas de allá y yo contarles el viajecito que me he pegao con mis navarricas queridas. Casualmente, mientras esperaba en el cajero automático me encontré con Eider y sus amigos, que ya se volvían a Santiago, increíble, no tenía ni idea de que estuviesen por aquí. Y mientras hablábamos, alucinando por habernos encontrado en este pueblo tan pequeño, aparecen Ana e Irati, que recién llegaban de Uyuni. Un triple encuentro