Copán, ruinas y dieciocho conejos
El viaje relámpago de este fin de semana ha sido del todo improvisado, me llamaron el viernes y me dijeron “hay un espacio en un carro camino a Copán, te animas?” y claro, no pude decir que no. En cinco horas nos plantamos en el pueblo de Copán Ruinas, tras pasar la frontera El Salvador-Guatemala y Guatemala-Honduras. El pueblo es pequeñito, con su placita, su iglesia y MUCHA tranquilidad. Los paseos por el pueblo a la noche han sido algo de agradecer. Pero el atractivo del lugar son las ruinas mayas que se encuentran a 10 minutos caminando. No son enormes, pero tienen muchas estelas bien conservadas, unos relieves preciosos a todo detalle. Además se pueden visitar por debajo