Tegucigalpa. Entre picachos y montañas
Tras un viaje atravesando Estados Unidos y miles de controles aduaneros de todo tipo que mejor ni mencionar, aterrizamos en Teguz, capital Hondureña montañosa y de complicado aterrizaje. Me vinieron a buscar de Progressio, me enseñaron la oficina, me presentaron a la gente de la sede de Honduras y me llevaron al hotel para descansar. Al día siguiente, ya con el jet lag superado, cada día tuve reuniones con cada una de las personas de Progressio. Yo que me imaginaba triste y aburrido encerrado en el hotel por las noches, me encontré una gente impresionante que me sacó a cenar, a tomar y a pasear por diferentes lugares típicos catrachos. También tenía organizado un tour rápido por la