Este fin de semana ha sido movidito, empezó el viernes saliendo un rato por los bares típicos del barrio, el sábado nos juntamos para comer por ahí y aprovechamos para visitar el centro de día. Es otro mundo, según te vas adentrando te encuentras con carros que se cruzan, vendedores ambulantes gritando “cora, cora coraaa!” * , tiendas de películas y discos piratas, ropa de segunda mano y un sinfín más de cosas. Una explosión para todos los sentidos. Entramos en uno de los edificios, que me recuerdan mucho a los de La Habana en Cuba, con escaleras grandes y un amplio espacio lleno de billares; el lugar en concreto se llama La Dalia, y la próxima vez que vaya al centro me llevaré la cámara, porque además tiene unas buenas vistas de la plaza de armas.

*Cora es lo que llaman acá al cuarto de dolar, los 25 centavos; en ellos pone “quarter dollar” (si pronuncias quarter a lo gringo, suena cora).

A la noche fuimos un rato a casa de Marcos a tomar unas cervezas con limón y ver a Ximena que crece por momentos. Más tarde fuimos a unos conciertos que había por aquí cerca de reegae, ska y rocksteady, estuvieron muy entretenidos.

Y bueno, hoy a la playa del Zonte. Allí tiene un espacio un catalán llamado Manel muy simpático. Hemos comido paella y jugado a los bolos con cocos que había por la playa. Un lugar increíble.