La cola de ballena que aparece y desaparece

Fecha: Julio de 2022 | Septiembre 2023 Este es uno de los lugares más famosos de la costa pacífica de Costa Rica, y no es para menos. Se trata del primer parque nacional que existió en el país cuyo fin era preservar recursos marinos. Además, parece que el paisaje costero lo pide a gritos. El Parque Nacional Marino Ballena, cuando se observa desde el cielo, tiene forma de cola de ballena; pero solamente cuando se mira en marea baja, pues cuando sube el nivel del agua, desaparece totalmente. El pueblo de Uvita es el lugar más cercano al parque, aunque para hospedarse cerca de la playa, tienes que sacrificar la cercanía con el pueblo, pues son todo condominios de residencias

En barco hacia la Isla de Maio

La Isla de Maio es la isla más próxima a Santiago, donde se encuentra Praia, la capital de Cabo Verde. Aunque uno se esperaría un servicio constante de barcos que van y vienen, resulta que el servicio ni siquiera se ofrece todos los días. Además, la página de Interilhas, que ofrece los viajes en barco, lanza un calendario de programación mensual, por lo que tampoco se pueden comprar con mucho tiempo de anticipación. En fin, que al menos, para ir a esta isla, se puede salir desde Praia los viernes por la tarde y regresar los domingos, y eso es lo que hicimos. El viaje merecería una entrada entera para describirlo. Llegamos, como indicaba el boleto, una hora previo a

Reencuentro con el Pacífico

Brevemente haré esta entrada mencionando un fin de semana en el que nos fuimos a visitar la playa de Las Peñas, en la provincia ecuatoriana de Esmeraldas. Este pequeño pueblo de pescadores, además de unas playas prácticamente desérticas, ofrece una serie de casetitas rudimentarias donde puedes probar la gastronomía típica de la provincia. Disfrutamos de unos ricos encocados, camarones reventados y arroces con mariscos. Todo aderezado con raspaditos de coco.   En la playa abundan los cangrejos, que se alejan cuando te acercas a mirarlos. Los atardeceres son agradables y los mosquitos voraces.   Aprovechamos la cercanía a la Reserva Cayapas-Mataje, donde se supone que se encuentran los manglares más altos del mundo, para acercarnos a curiosear. Las indicaciones hasta

Montañas y lagos

Siempre me han gustado las montañas, el fresquito a su alrededor y abrumarme con sus altos picos nevados. Por eso, cuando escuché hablar de las montañas de Rwenzori, decidí que tenía, al menos, que ver ese pico alto. En el Parque Nacional Rwenzori Mountains, se encuentra el tercer pico más alto de África; el Margarita, de 5.109 metros sobre el nivel del mar, sobresaliendo entre una serie de picos situados en lo que se llama “Monte Stanley”.   Estuvimos averiguando la manera de dar una vuelta por el parque, sin la intención de subirnos a la cima, por supuesto, pero sí con la idea de dar un paseo de un par de días acampando. Pero cuál fue nuestra ingrata sorpresa

Húmedo Zanzibar

Aquí finaliza el viaje de Septiembre. Cuatro meses me ha llevado el ir describiendo los lugares que pudimos visitar. Sé que he tardado, pero finalmente, queda reflejado en la página, que es lo importante. Poder compartir las fotos de los lugares es el motivo principal de la existencia de este blog; así que allá vamos.   La llegada a Stone Town supuso un brusco cambio de sensación; pasamos del calor seco del norte tanzano a la humedad chorreante que te envuelve y te atrapa en la isla de Zanzibar (y te seduce, como diría Javier Reverte). Aquí no nos podíamos mover, a los dos pasos ya estábamos empapados, pero hicimos el esfuerzo y paseamos, paseamos y nos dejamos seducir por

El otro lado de la bahia

Al otro lado de la bahía de Pemba, muy cercano pero muy lejano si no tienes un barco, se encuentra un complejo de casas de lujo, apartadas del bullicio, tranquilas y en las que viven unos grupos de blancos de los que poca gente sabe nada.   El lugar es maravilloso, con arrecifes de coral en la primera línea de la playa, tanto, que cuando baja la marea algunos asoman. Un lugar tranquilo, sin ruido, sin basura y donde poca gente te puedes encontrar. Nada que ver con el caos de la playa de Pemba los domingos por la tarde.   Entre estas casas existe un hotel compuesto por varias casitas, donde pasar la noche vale 500 dólares por persona

IBO (Ilha Bem Organizada)

De nuevo en Pemba, y de nuevo chapa.   Salimos hacia el ya famoso en este blog, Parque Nacional das Quirimbas. Este archipiélago es grande y las actividades por hacer son muchas. Aunque ya había pasado por allí una semana, aún me quedaban unas cuantas cosas más por hacer en la zona (aparte de relajarse y disfrutar escuchando el mar mientras sube y baja). Desde nuestro campamento central en la Isla de IBO, hicimos un par de visitas interesantes. Fuimos a la nada, literalmente. Cuando baja la marea, se descubre un banco de arena, un islote precioso, en mitad del océano azul. Una maravilla para la vista y para el cuerpo. Rodeado de corales (aunque ciertamente algo profundos, y de

Ilha de Mozambique

Retomo el blog después de unas pequeñas vacaciones alrededor del norte de Mozambique. Vino mi amigo Juan Ceñal de visita, y nos hemos recorrido algunos puntos impresionantes de este alargado y diverso país.   Normalmente, suelo actualizar esto durante los viajes, tratando siempre de hacer entradas por cada etapa del viaje; sin embargo, el acceso a internet es complicado y lento, de modo, que he esperado a estar en casa para poder ir subiendo las correspondientes entradas de cada etapa del viaje.   Comienzo con Ilha de Mozambique, pequeña isla colonial unida a tierra por un puente de 3 Km, donde los portugueses hacían antaño sus tratas de esclavos, al igual que en la isla de Ibo, sobre la que

Playas y paisajes

Estos días, entre reunión y reunión, pasamos con el coche por la espectacular playa de Chuiba. Pudimos bajarnos para hacer unas cuantas fotos y así enseñar por aquí las excelentes vistas que nos rodean por todas partes. Y añado de regalito final; una foto de los miles de baobabs que rodean el pueblo donde trabajamos. Aquí los llaman embondeiros, y hay miles de historias africanas y fantasías alrededor de ellos. Espero poder ver algún ritual de hechicería antes de irme…

Sentirse millonario por dos días

Este fin de semana, después de informarnos de que el tsumami proveniente de Japón alcanzó el impactante tamaño de 5 centímetros, decidimos irnos a la playa para estar tranquilos. Entre unas cosas y otras y mediante contactos que no explicaré porque serían aburridos para ustedes, lectores ajenos a mi entorno salvadoreño, acabamos en un rancho a orilla de acantilado. Pudimos reposar en las piscinas saladas que se rellenan con las olas del mar y leer con unas preciosas vistas de fondo, mientras corría la brisa y no se escuchaban más que los ruidos de las olas y las chicharras. Me he sentido durante dos días como un cafetalero completamente afortunado. PD: Felicidades a mi querido hermano, ojalá pudiese regalarte un

Playa El Tunco

Aunque parezca mentira, y siendo una de las playas más míticas de El Salvador, aún no había ido nunca a la famosa playa de El Tunco, un lugar bien bonito donde dicen que los atardeceres son espectaculares. Mucho surfero gringo y no gringo, cerveza pilsener y cócteles de camarón. Después fuimos al puerto de La Libertad a comprar camarones grandes frescos, una maravilla de la naturaleza. Esos intestinos hinchados como globitos son de anguila y se exportan a Asia, para los amantes de las partes más raras de los pescados.

Visita al centro y playa el Zonte

Este fin de semana ha sido movidito, empezó el viernes saliendo un rato por los bares típicos del barrio, el sábado nos juntamos para comer por ahí y aprovechamos para visitar el centro de día. Es otro mundo, según te vas adentrando te encuentras con carros que se cruzan, vendedores ambulantes gritando “cora, cora coraaa!” * , tiendas de películas y discos piratas, ropa de segunda mano y un sinfín más de cosas. Una explosión para todos los sentidos. Entramos en uno de los edificios, que me recuerdan mucho a los de La Habana en Cuba, con escaleras grandes y un amplio espacio lleno de billares; el lugar en concreto se llama La Dalia, y la próxima vez que vaya

Playa de San Blas

Finalmente no fuimos al centro. Después de una fiesta de disfraces el viernes que se prolongó hasta la mañana del sábado, decidimos que nos merecíamos un domingo playero, así que el sábado lo ocupamos en descansar en nuestras casas y hoy nos hemos ido unos cuantos a la playa. El concepto “playa” aquí es un poco diferente, no pones tu toalla en el suelo y pasas ahí tirado el día. Aquí se estila más el ambiente chiringuito vallado con acceso a la playa, donde puedes dejar tus cosas con tranquilidad. Había una piscina también, cervezas, cartas, hamacas, pescaditos, pelícanos, sol y agua caliente. También hubo buenas olas, recordemos que es Océano Pacífico, y no tiene nada de pacífico precisamente. Creo