Esta entrada, aunque con un año de retraso, sirve para actualizar a todos y todas las lectoras nuestras ubicaciones y cambios de rumbo recientes. Desde marzo de 2022 estamos residiendo en la ciudad de San José, capital de Costa Rica. Siempre trabajando con la Cooperación Española, pero en esta ocasión, apoyando en la implementación de un programa de medio ambiente y cambio climático que se desarrolla en 19 países de la región de América Latina y Caribe. La oficina de la AECID en Costa Rica es especializada en estos temas y tiene un carácter regional, por lo que la oportunidad de trabajar desde aquí se me hacía muy interesante. Fue un proceso de selección de casi un año, pero finalmente conseguí acceder a la plaza y aquí nos encontramos establecidos.
Regreso después de 11 años a Centroamérica, y espero poder recorrer durante este periodo los rincones que aún no he explorado por esta parte del mundo.
Poco sabemos todavía de este país, más allá del conocido “Pura Vida” y de lo internacionalmente famoso por su turismo de naturaleza. No tenemos ninguna prisa, y poco a poco estamos conociendo diferentes lugares hermosos y aclimatándonos a esta ciudad.
Hemos pasado de un extremo al otro; en Cabo Verde no llovía prácticamente nunca, y aquí, durante 9 meses al año, llueve cada día. La humedad en San José es abrumadora, pero aprenderemos a vivir con ella y encontraremos soluciones, al igual que nos acostumbramos a la bruma seca y a la arena que se colaba por las ventanas en Praia.
Lo más complicado de decidir a partir de ahora será si pasamos el fin de semana en el Caribe o lo pasamos en el Pacífico. En ambos lados las playas son preciosas y azules, el calor abunda y la naturaleza te rodea.
Prometo entradas próximamente sobre los lugares que hemos ido visitando en este tiempo.