Cañon del Colca y sus cóndores imaginarios
Recuerdo a los lectores la falta de acentos en este teclado. Hoy y ayer los hemos pasado en el cañón del Colca, que como dije es el segundo cañón más grande del mundo, lleno de terracitas de cultivo tradicionales incas, millones de pequeñas mujeres más fuertes que 100 europeas, cargadas de sacos inmensos con vete usted a saber que y en otras ocasiones niños a los que ni se les ve la cabeza asomar. Hombres pequeños y sonrientes con pocos dientes pero a la vez sonrisas preciosas, tostados por el sol y acostumbrados a la altura. Nosotros a los 4800 metros ya no podemos respirar a gusto, y eso que acabamos de empezar, mañana en Puno superaremos la barrera de