Chachapoyas y tantas cosas
Chachapoyas, ese lugar de peculiar nombre en el que no esperábamos encontrar demasiado, resultó ser un pequeño pueblo rodeado de espectaculares restos pre-incas. Mucho que ver y demasiado poco tiempo, pero bueno, vimos lo imprescindible. Tomamos un tour con guía y a mitad de camino reventamos rueda, el gato de la furgoneta estaba estropeado y paramos a un coche, en el que casualmente viajaba el presidente de la región, que amablemente nos prestó su gato y nos dio la mano a todos. Votaremos por él en las siguientes elecciones, seguro. Las enormes ruinas que Kuélap, de la cultura chachapoya, que significa “hombre de los bosques”. Es una ciudad más grande que Machu Picchu, o al menos creo que es más