COVID-19. Aislados en la isla

Escribo esta entrada desde uno de los parones viajeros más grandes de mi vida. Esta pandemia nos ha caído como un jarro de agua fría, y nadie esperaba que fuésemos a llegar tan lejos como lo hemos hecho. Vuelos suspendidos a nivel mundial, fronteras cerradas, poblaciones enteras en aislamiento domiciliario, los sistemas de salud en los huesos y sobre todo, las desigualdades, más acentuadas que nunca. Los horrores del capitalismo global se muestran en estos momentos, y cada uno rema en direcciones opuestas para salvar y proteger lo suyo. En Cabo Verde, se declararon los primeros casos en Boa Vista a inicios de marzo, y para la tercera semana del mes, cuando apenas había casos en esa isla, nos pusieron

Despedidas con riesgo biológico

Recién vengo de despedir a Simón. Llevaba semanas cociéndose una despedida épica de las que hacen historia, que crease un antes y un después en la historia de las despedidas de amigos, pero realmente lo que se estaba cociendo era el divertido virus porcino humano, gripe A o como lo quieran llamar, y antes de ayer estallaron todos enfermos, bueno, no todos, algunos sobrevivimos, aunque seguramente, acabemos igual que ellos. Empezamos la despedida en casa de Nacho comiendo un Ceviche que hicieron entre él y nuestro amigo valdiviano Carlos, que ahora está rondando por Santiago de nuevo. En la comida éramos los tres y Simón, que comió a duras penas y durmió en el sofá. A la noche mi casa