Nómadas hacia ninguna parte

Dentro de poco vuelve a ser 28 de Noviembre, ya hace más de cinco meses que regresé de Santiago de Chile, hace un año que nos pusimos la mochila y salimos a pasear pensando que tres meses eran mucho tiempo, se acabaron mis periplos sudamericanos y se caducaron mis vacunas. Cuando marché hacia allá jamás imaginé que iba a terminar en un barco lleno de hamacas cruzándome la Amazonía y mirando las estrellas desde el pulmón del mundo. Ahora mi forma de ver el mundo es diferente, no puedo olvidarme de aquello, tampoco quiero, y no hago más que pensar en cómo podría yo seguir descubriendo lugares como aquellos toda mi vida. Ahora sé que hay pingüinos a la altura del ecuador, que existen cañones mucho más profundos que el del famosísimo