Parque Nacional Krka

Split por la noche, como dije en la entrada anterior, es algo mágico. Dentro de las murallas del casco histórico, es una ciudad fresca, con ambiente agradable y músicos callejeros que le aportan un toque excepcional. Por la mañana nos recibió con un sol estupendo, con calor y con poca gente. Paseamos un poco para ver con luz lo que habíamos recorrido por la noche, subimos hasta el campanario de la catedral, y las campanas repicaron brutalmente cuando estábamos subiendo por la escalera que las rodea; casi morimos de un infarto, pero una vez arriba, las vistas de la ciudad, el puerto y el mar Adriático, merecieron la pena. Posteriormente nos fuimos hasta el Parque Nacional Krka (¿alguien sabe cómo

La ruta de las mezquitas

Amanecimos en Sarajevo, donde habíamos reservado un free tour con Adis Hamzić. Este chico, con muchísimos conocimientos de historia nos llevó a pasear por las calles de la ciudad contándonos con mucho detalle algunos de los últimos eventos acontecidos en la historia reciente de la ciudad; desde el asesinato del archiduque del Imperio Austrohúngaro que dio inicio a la primera guerra mundial en 1914 hasta la última guerra balcánica que supuso la desintegración de Yugoslavia. Paseamos por las calles principales, conociendo los mercados de antigüedades, el antiguo bazar, el puente latino, la mezquita Gazi Husrev-beg, del siglo XVI y la más grande del país. Nos explicó sobre la historia de Vijećnica, un edificio precioso que ahora funciona como ayuntamiento, pero