Humedad y cuestas arriba en Chiang Mai

Comenzamos acercándonos a la aldea Karen de exiliados de Myanmar, donde un pequeño grupo de mujeres Kayan (las famosas mujeres jirafa) han sido toleradas en este área y han prostituido su aldea y tradiciones, convirtiéndose aquello en un “antropológico” donde se comercia con artesanía y se dejan fotografiar amablemente. Quizás es triste esta situación, pero de este modo pueden sobrevivir sin la constante opresión de sus países originales. Lo peor de todo, como siempre, es que no solo se han quedado ahí en modo museo, sino que algún misionero consiguió introducirles el cristianismo, y la construcción mas grande de la aldea es una iglesia con el crucifijo al fondo. Tras eso, nos fuimos adentrando en la zona de montana, hasta

Y tras la tempestad viene la calma

Cruzando fronteras rápidamente, empalmando autobuses y apareciendo en el norte de Tailandia, en Chiang Mai, un lugar del que he venido escuchando por todos los viajeros a lo largo de este rápido tour asiático. En Tailandia vuelve a no existir eso de los acentos en el teclado y encontrar un hostal bajo la lluvia no es muy divertido, pero es viable. (acentos corregidos a posteriori) Toda la noche lloviendo hasta las 10 de la mañana, que súbitamente paro y salio el sol. ¿Sera esto a lo que llaman “el monzón”? Esta es una ciudad amurallada llena de wats (templos) y sede de una universidad budista bastante grande. Mires donde mires hay monjes con sus colores naranjas. He estado paseando bajo