Bueno, salí de Potosí hacia Uyuni sin saber si encontraría autobuses a Calama (Chile). Llegué a Uyuni a las 2 de la mañana, y en la terminal de buses había un cuarto con una mujer dormida que era la encargada de vender los pasajes; intenté despertarla pero no contestaba, así que me puse a mirar entre sus papeles y encontré que había un bus a Calama a las 5 de la mañana… bien! hubo suerte, así que esperé de 2 a 5 hasta que vino el bus, después unas terribles 5 horas de viaje hasta la frontera con el mayor de los fríos que he pasado en un bus en mi vida. En la frontera estuvimos unas 3 horas para que nos pusiesen los sellos de salida de Bolivia y entrada de Chile (para salir de Bolivia hay que pagar 21 bolivianos, menos mal que llevaba dinero). De camino desde la frontera (Avaroa/Ollagüe) el bus paró en una casa en la que estaban celebrando el carnaval y nos invitaron a comer (dos platos y vaso de vino), fue super divertido!
Por fin llego a Calama y compro el pasaje hacia San Pedro. Cuando llego a San Pedro empiezo a caminar y veo que todos los hostales son carísimos, pero empecé a hablar con unas chicas (Carla y Rosario) que resultaron ser super simpáticas y me han dejado dormir en su tienda de campaña esta noche y me dieron de cenar y me han dado de desayunar, ahora compraré yo algo de comida para dejar de chuparles la sangre a las pobres.
Esta tarde a las 19:00 vienen Ana, Irene, Teresa y Jara, y haremos los carísimos tours a Uyuni y al desierto de Atacama….qué ruina, madre.
PD: Iratii, Anaaa (lease con voz de “hay canchitaaa”) dónde estáis???